viernes, 14 de marzo de 2008

Mon prince charmant!


Siii, mi príncipe azul está reencarnado en él!
Su nombre es Jean-Baptiste Maunier, y seguro que os suena de Los Chicos del Coro, pues hacía el papel del protagonista (ésta foto es una captura de la película). Por ésta razón, he visto el film miles de veces :P
Para mi es perfecto, tiene todos los requisitos mínimos que podría pedir... es guapo guapísimo, pelo castaño tirando a rubito en ocasiones, y con el peinado que a mí me gusta; y unos ojos verdes oscuros que me enamoran cada vez que lo veo actuar... dice tanto su mirada!
Y bien, él es mi prototipo de chico perfecto... al menos físicamente, claro está. Me gusta que sean como él, no muy altos, de mi estatura o más bajos aún; pelo larguito de esa manera; delgados, que no famélicos; fuertes, anchos de hombros; manos bonitas; y, sobre todo, unos ojos bellos, expresivos, que transmitan sentimiento y que digan lo que sus labios callan.
Todo esto en el ámbito físico, el superficial, por lo que es imprescindible en parte.
Ahora bien, hablando de su personalidad, ha de ser alguien abierto, pero con esa timidez que les da encanto a algunas personas, muy sincero, en el que puedas confiar, (y sobre todo, que confíe en ti) ; ingenioso, simpático, que piense en mi y me tenga en cuenta; alguien cariñoso, tierno, amable, que se deje querer, que te repita lo que siente hasta la saciedad; un chico honesto, muy muy honrado, que diga lo que piense, noble. También ha de tenerse en estima, pero tendrá que ser humilde, mucho.

Últimamente estoy muy necesitado... necesito por una vez repartir todo ese cariño y ese amor que me tuve que guardar el año pasado, necesito acariciar, abrazar, besar... necesito sentir por primera vez que alguien me abraza fuertemente, queriendo fundir nuestras almas en una sola... necesito sentir el aliento de alguien amado en la nuca, comerle la cara a besos, sentir tus caricias hasta hacerme caer en el sueño, donde todo sigue tal y como está para siempre...
Necesito enamorarme, sentir ese pálpito en el pecho cada vez que me mire a los ojos, o cómo el amor se me escapa en profundos suspiros cuando se aleja de mi...
Pero he de dejar de soñar, es lo mejor, no aparecerá ese príncipe azul por mucho que busque y rebusque. Así, al no desear, no sentiré ninguna decepción. Por algo me gusta tanto la frase... "dichoso del que nada espera, pues nunca será defraudado"... tanta verdad esconde, y tanta relación tiene conmigo... Pero es tan difícil evitarlo...

No, Gato, deja de pensar!
Deja todo fluir, que siga su ritmo; mantén tu mente alejada, en los ojos de Jean-Baptiste, en tu guitarra, en la música, en el buen ambiente con los amigos... déjalo todo, quizás haya oportunidad después de recuperar el tiempo que habías perdido.
Dejaré mis rayaduras, mi estado de ánimo sigue cambiando como la aguja de la brújula, apuntando hacia destinos totalmente opuestos...
Y, por si algo faltaba hoy, ahora acabo de contarle lo de mi homosexualidad a una amiga no tan amiga... porque no tenía más remedio, ella lo sabía porque mi ex-enamorado se lo contó, y ella lo contó a otras chicas. Ya lo sabe de mi propia boca... no hay marcha atrás. No se lo dije en su momento porque es una marujona, y la conozco demasiado bien. Esperemos que sea sensata y no se lo diga a nadie más, lo último que querría serían los cuchicheos a voz baja tras mi espalda.
Hoy además también estoy muy confuso, porque no sé si me gusta un amigo de mi hermana... :S... tendré que mirarle más, a ver si le veo algo de pluma... por lo pronto vi que está depilado, que es campeón de España en flamenco, y que tiene una flexibilidad increíble.

Bueno, bueno, rejalémonos... escuchemos a mi querido Jean-Baptiste, que, además de sex-symbol (para mi, claro está, que yo tengo unos gustos un poco bastante fuera de lo normal), es un perfecto soprano.





Espero que os guste!

Y siento mis últimas entradas, son bastante sosas... he de buscar la inspiración.

Besos, abrazos, y demases!