domingo, 1 de noviembre de 2009

Sigo vivo.





Sí, todavía respiro.

¿Pero qué queréis que os diga?

Que mi vida es como una banda de Moebius. No hay otra cara, ni cambio ni transformación.

Todo sigue igual... incluso peor.


Pero sí, mantengo estables mis constantes vitales. En última instancia, supongo que no puedo quejarme.



Hasta la próxima.

Gato.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me alegro que sigas vivo, aunque dejas una preocupación en el ambiente con eso de que estas "incluso peor"... venga tío, que tu puedes con todo.

Un beso cielo

BsF dijo...

Vaya sorpresa leerte de nuevo, no podía entrar a tu blog... Lo volviste privado y perdí toda esperanza de saber de tí.

Espero que no sea algo grave, piensas contar algo sobre eso ?

Unknown dijo...

¡¡¡Amiguitooooo!!!

El sólo hecho de volver a publicar dice muchas cosas :)

A veces la vida parece una banda de moebius (by the way, ¡que cachetada cultural esa de la banda de moebius, eh?) pero nunca olvides que tienes dentro de ti el potencial para ser feliz, y sobre todo, que TE MERECES la felicidad.

Un abrazo grandote!