Rememorando una vez más el finde...

Pues sip, porque ayer me di una jartá de escribir para que luego no pudiese postearlo...

Por alguna razón inexplicable, el ordenador no me dejaba meterme en ningún blog, ni en el mío ni en ningún otro, así que no había manera de actualizar... Pero menos mal que mi ángel de la guarda en ese momento, eGeo (un beso desde Málaga!!), me pasó el link de una página donde escribir y que se postease en mi blog. Y aún así, ese día la fortuna no jugaba de mi lado, en el momento en el que lo había terminado y lo iba a enviar... pluf, se fue la luz en el piso!

Así que ahora me dispongo a escribir todo (o lo que recuerde...) de lo que os quise contar ayer.

El fin de semana la verdad es que estuvo muy bien. No es que hiciese nada especial, sino que he pasado estos días en mi otra casita (llamémosle Torre del Mar, aunque no esté propiamente allí) bastante animado y contento, sin saber bien por qué. El viernes por la tarde, como ya dije, salí con mi padre a probar la moto por el Recinto Ferial, y la verdad es que aprendí rapidísimo! ^^
Esa misma noche nos fuimos a Torre del Mar, llegando allí para cenar y ver "Tu si que vales". También intenté ver algo de "Todos a 100" en mi cuarto, pero me vicié al Devil May Cry hasta tarde y me lo perdí :P. Por lo tanto, me levanté tarde, como todos en la familia ese día, y nos fuimos a un restaurante italiano a comer, donde llamé a Kitty (que andaba en Madrid, recordad) a ver cómo le iba y a contarle mis últimas (e insignificantes) novedades con Adán. La tarde pasó tranquila, estuve en mi azotea haciendo mi preciosísimo puzle de 2000 piezas, escuchando música, viendo el mar y oyendo al viento golpear la ventana; y volviendo a engancharme al billar, pues aunque me encanta y no se me da mal, había perdido algo de práctica. Me cené un sandwich vegetal de los míos con la rica lechuga a la plancha, de mi invención, y me acosté... Esta vez si pude ver Todos a 100, pero me aburrió enseguida, todo eran coños y tetas... cuándo pensarán en el colectivo gay!! :P Algun día nos haremos sonar en ese aspecto ^^ Así que me volví a viciar al Devil May Cry, pero no estuve hasta muy tarde, pues a la mañana siguiente quería salir con mi padre a andar.
Así es, obedeciendo a mi propósito de acercarme más a mi padre, nos fuimos los dos a las 10 de la mañana a andar por la playa (hicimos unos 10 km, en 3 horas). Estuvimos hablando bastante, me contó que, aunque en casa cada uno tenía su problemilla, mi estado de ánimo era el que más le preocupaba. Decía que él lo pasaba mal porque me veía a mi deprimido la mayoría del tiempo, que no era feliz y que no tenía fuerzas ni ganas para nada. Me dijo que ya estaba más tranquilo, pues veía que ese fin de semana estaba mucho más contento y activo.
Me quedé de piedra, sinceramente... yo que creía que sabía aparentar muy bien mi ánimo ante la familia (pues NUNCA he dado muestras de flaqueza ante ellos...), pero veo que con mi padre eso no funcionaba... me sorprendió bastante! Así que le entendí y le convencí de que ya todo estaba mejor, que había pasado momentos malos, pero que como sabía que pasarían, no habría de qué preocuparme.

También tocamos otros temas... pero en especial, durante una hora aprox., charlamos sobre la homosexualidad. La verdad, no sé por qué pero saqué yo el tema... simplemente le pregunté sobre un amigo gay que tiene que vive en Logroño, por saber cómo está y cómo le va la cosa, pero él siguió hablando mucho más. Me daba su opinion sobre la homosexualidad, los gays y su forma de vida. Decía que comprendía que era vivir era más difícil para ellos, pues el mundo aún no estaba tan preparado como decían, y que la vida amorosa era muy "pasional, un día es el hombre definitivo de tu vida, y al siguiente lo quieres matar"; es decir, que la vida homosexual en general es muy inestable. Un buen ejemplo es lo que le pasa a su amigo logroñés, que tiene 43 años y aún no ha tenido un novio estable, todo han sido líos de una noche. Y mira que guapura, personalidad y dinero no le faltan... pero al pobre le ha tocado vivir así. Yo no quiero vivir como él... por mucho dinero que haya conseguido por su trabajo, por su pedazo de piso en mitad de Logroño, por todas sus noches de juerga... yo lo único que necesitaría es estabilidad!
Seguimos hablando de eso un rato, sobre otros amigos y compañeros de trabajo de mi padre que son gays, sobre sus vidas, etc.
Y en todo esto, sentí que sería un buen momento para contárselo todo... pero no, no pude, no sé por qué, pero no fue miedo, pues éste ya desapareció. Quizás solo sea esperar al momento de estabilidad en mi vida, por lo menos emocional, para salir del armario oficialmente. Porque que él lo sospeche y lo de por echo, no lo dudo ya en lo más mínimo.

Poco más que contar de ese día... solo que de vuelta ya en mi pueblo, salí con mis padres en la moto, lógicamente, ellos dos en la de mi padre, y yo en la mía. Ay Diós, qué contraste y qué vergüenza!!... Ellos en la enorme Honda Shadows algo tuneada de mi padre, y yo en mi vespita negra, a 50 por hora como mucho (hasta que haga unos 1000 km y le quiten el maldito limitador...). Dimos varias vueltas por mi ciudad, fuimos a casa de Marcos y Ariadna (viven en la misma urbanización), a la de Lea (que también vive en el quinto pino), al castillo al lado de la playa y a la Roca de la otra punta del paseo marítimo. En total, unas 2 horas, 40 kilómetros gastados, y mucho placer!
Ahora si, ya que lo he probado, puedo decir que me gusta conducir...
Y eso que antes le tenía pánico a las motos y a los coches! Se ve que todo hay que probarlo, y si te gusta, te lo llevas...

Un beso a todos!!

^^

Y ojo, este es el post de ayer domingo, tras un fin de semana bastante alegre...

Ahora toca el del lunes!